El libro de hoy viene recomendado por
una Especialista en Nutrición de un Centro de Salud del SERGAS a una paciente y
lo subo a mi espacio de LECTURAS PARA COMPARTIR porque, como dicen los autores del
libro, comer va mucho más allá del hecho de nutrirse.
Vitoria Lozada y Carlos Moratilla son
los autores de “Por qué comes como
comes” publicado por Plataforma Actual en 2020.
Una nutricionista y un psicólogo se
unen para escribir este libro. Victoria
Lozada (Instagram: nutrionisthenewblack) es dietista-nutricionista, con Máster en Trastornos de la Conducta alimentaria y la
Obesidad. Especializada en alimentación vegetariana y vegana. Es la autora de La buena nutrición igualmente publicado
por Plataforma Editorial en 2018. Carlos
Moratilla (Instagram: moverepsicologia) es psicólogo sanitario y terapeuta
licenciado por la Universidad Autónoma de Madrid. Se ha especializado en
Psicología Clínica y de la Salud y en Prevención y Tratamiento de las Conductas
Adictivas por la Universidad de Valencia.
UNA NUTRICIONISTA MÁS
UN PSICÓLOGO
Los autores nos comentan el porqué de
esta unión:
“Como vas a ver a lo largo de estas
páginas, la psicología como disciplina
científica que estudia el comportamiento de las personas tiene mucho que
aportar en la comprensión del fenómeno de la alimentación, pues comer no
deja de ser un comportamiento como cualquier otro que responde exactamente a
las mismas leyes.
Asimismo, la alimentación —la
nutrición en cuanto ciencia realmente— se ve enriquecida cuando considera la
psicología como su hermana”.
[…]
“Porque
alimentarse es un comportamiento ciertamente complejo que va más allá de la
acción misma de nutrirse. Y es que en torno a la alimentación intervienen
cuestiones tan trascendentes como la cultura, la biología o aspectos
socioeconómicos que van a propiciar que una persona mantenga una relación
particular con la comida.
[…]
“Así pues, el sujeto dificulta la ecuación
porque el acto de comer estará influido por la historia de aprendizaje que haya
desarrollado, esto es, por su estilo de vida, su personalidad o su relación con
el mundo y consigo mismo.
El
resultado es un acto —una relación con la comida— que es único e irrepetible
como única e irrepetible es la persona que lo lleva a cabo”.
[…]
“Deberíamos
considerar que cuanto somos es un conjunto de experiencias, memorias,
creencias, miedos, emociones, conocimientos, pensamientos, juicios y —claro,
cómo no— órganos, enzimas y hormonas, sí, las cuales se hallan en comunicación
con esas experiencias y memorias. Somos todo eso, somos esa relación, esa
conexión, y mucho más”.
Lozada, V. y Moratilla, C. (2020): “Por qué comes como comes”. (pp. 13-18) Plataforma Editorial.
EL ESTILO
DE VIDA
Los autores nos explican por qué
fracasan las dietas en el capítulo 7 y nos hablan de la importancia del estilo
de vida:
“Al final, las personas terminan
confundidas por pensar que una dieta es superior a otra cuando, de hecho, los cambios en el estilo de vida, y no en
los tipos de dieta, son las verdaderas maneras de prevenir el aumento de peso
o de ayudar en la ganancia de peso en caso de que se necesite, y también de
prevenir la diabetes, la hipertensión y demás enfermedades cardiovasculares.
Lo que verdaderamente importa es el cómo y el para qué comemos, junto con otras cosas en las que podríamos
intervenir que atañen al estilo de vida, tales como la actividad física, la
educación nutricional y las conductas de apoyo que ayudan a que exista un buen
mantenimiento en el camino a largo plazo”.
Lozada, V. y Moratilla, C. (2020): “Por qué comes como comes”. (pp. 133 y 134) Plataforma Editorial.
TRATAMIENTO INTEGRAL
Entre las siete estrategias para
mejorar la adherencia a los cambios nutricionales o de comportamiento te recojo
la número dos, que está relacionada con el estilo de vida y dice:
“ Trata de centrarte en realizar
intervenciones en tu estilo de vida: asesoramiento
dietético —como, por ejemplo, conocer las porciones necesarias para el
momento vital de cada uno de nosotros, reducir la oferta de alimentos
ultraprocesados en casa y aprender a buscar opciones de calidad—, asesoramiento en torno al ejercicio
—cómo establecer objetivos, determinar la frecuencia y hacer ejercicio de
manera segura, sobre todo con una actividad que te guste, y, por último, pero
igual de importante, en cuanto a la modificación
de conducta, lo cual se consigue con todo lo anterior y con un buen
asesoramiento psicológico —entender nuestros hábitos y de dónde vienen, analizar la raíz de
nuestro comer emocional, contar con
alguien de confianza con quien hablar sobre esto, mantenernos motivados y
comprender nuestra hambre, apetito y saciedad—. Es decir, debes buscar un tratamiento integral que contemple las diferentes áreas de tu vida.
Lozada, V. y Moratilla, C. (2020): “Por qué comes como comes”. (p. 154) Plataforma Editorial.
UN PROCESO DE APRENDIZAJE
Y para terminar esta LECTURA PARA COMPARTIR y con el permiso de los autores; te extraigo
este decálogo con algunas de las pautas, que desenvuelven a lo largo del libro,
para que cambies tus hábitos y alcances tus objetivos en nutrición y
psicología:
“El
cambio de hábitos y la consecución de objetivos en nutrición y psicología es un
proceso de aprendizaje que se realiza poco a poco:
a) Ponte
pequeños objetivos y que sean alcanzables. Si al principio los objetivos son
demasiado exigentes, lo normal es que no los alcances, algo que minará tu
motivación. Es mejor empezar con pequeños objetivos que puedas asumir para que
el motor de la motivación siempre esté funcionando.
b) Si esta no
existe, no esperes a que la motivación aparezca por arte de magia. Actúa y
paulatinamente asomará. También encuentra un aliciente que no se agote, que te
llene, que no tenga fecha de caducidad, como, por ejemplo, ir a una boda o
entrar en un pantalón. Estos son alicientes que no suelen durar porque tampoco
nacen desde un lugar de amor o cuidado propio.
c) Busca y
fomenta claves activadoras y alicientes que te ayuden a ponerte en marcha y,
sobre todo, a mantenerte. Aquí nos vale todo: desde mensajes de automotivación
hasta instrucciones para uno mismo, cambios en el ambiente, uso de pizarras,
pósits…, ¡lo que sea!
d) Pasa a la
acción: realiza las pequeñas tareas que te hayas propuesto. En la medida en que
estas formen parte de tu dinámica diaria, será más fácil que se asocien a ella
y que resulte cada vez más sencillo realizarlas.
e) Póntelo
fácil: pide ayuda, modifica el contexto, empieza despacio y sé paciente.
f) Trae al
presente los beneficios que se producirán en el futuro cuando los cambios se
hayan instalado: usa el lenguaje y la imaginación para recrearte en cómo este
cambio de hábitos te ayudará a obtener algo valioso, a encontrarte mejor o
superarte.
g) Si lo
cuentas, el refuerzo es mucho mayor: compartir nuestros pequeños logros conla
gente de nuestro alrededor es una forma muy estimulante de reconocerse en el
éxito y una forma probable de recibir un apoyo social que te ayudará a
mantenerte en ese cambio de hábitos.
h) Avanza: si
ya se han establecido los pequeños pasos del principio del proceso, genera
nuevos objetivos un poco más complejos y continúa.
i) Ahora
persevera y repite, pues esta es la mejor forma de que se establezca y afiance
el cambio.
j) Prémiate
por los logros obtenidos”.
Lozada, V. y Moratilla, C. (2020): “Por qué comes como comes”. (pp. 156 y
157) Plataforma Editorial.
Esperando que te haya gustado este
artículo, recibe un saludo muy cordial.
Paulino.