domingo, 12 de mayo de 2024

Recupera tu mente, reconquista tu vida

 

        La doctora Marian Rojas Estapé acaba de publicar su tercer libro Recupera tu mente, reconquista tu vida y sus dos libros anteriores Cómo hacer que te pasen cosas buenas y Encuentra tu persona vitamina fueron las obras más vendidas en España en el año 2022.

“La doctora Marian Rojas Estapé es psiquiatra. Licenciada en Medicina por la Universidad de Navarra. Trabaja en el Instituto Rojas-Estapé en Madrid y su labor profesional se centra principalmente en el tratamiento de personas con ansiedad, depresión, trastornos de personalidad, trastornos de conducta, enfermedades somáticas y trauma”.

        Rojas, M. (2024): “Recupera tu mente, reconquista tu vida” (Contraportada). Espasa.

        Mi querido/a lector/a esta vez te extraigo dos aprendizajes muy interesantes, uno es sobre alimentación y el otro es sobre psicología, espero que sean de tu agrado y enriquezcan tu SALUD INTEGRAL.



        Del capítulo 4 ¿Qué le hace el azúcar a tu cerebro?, solamente te extraigo una buena costumbre que realiza Marian para cuidar su salud:

        “Mucha gente en consulta me reconoce que siempre tiene hambre. Una de las causas clásicas es la ansiedad, que muchas veces se exterioriza con ganas constantes de ingerir alimentos, Hay otra cada vez más investigada los altos niveles de insulina.

        Cuanto mayor sea el nivel de insulina, mayor será el hambre”. 

¿Y cuál es la mejor herramienta para controlar la insulina?

[…]

        “No cabe duda que el ejercicio. Caminar tras una comida —los indios recomiendan dar cien pasos, ¡qué buena costumbre!— tiene sus razones. Si después de acabar nos quedamos sentados en la silla o nos vamos al sofá, la glucosa inundará las células y las mitocondrias se saturarán. Se producirán los radicales libres, la inflamación se incrementará y la glucosa que sobra irá a los músculos, al hígado y también a la grasa. Pero si tenemos un poco de fuerza de voluntad y nos levantamos y hacemos la caminata para la digestión —así la llaman los alemanes—, cuando la glucosa pase de los intestinos a la sangre las mitocondrias tendrán mayor capacidad de combustible. Así, podrán usar la que les quede para producir adenosín trifosfato ATP e inyectar energía a los músculos. Por lo tanto, si tienes comidas copiosas durante el fin de semana. Vuelve andando a casa o intenta hacer algo de deporte después. En mi caso he comenzado con esta práctica, y si algún día tengo cena fuera con familia o amigos, vuelvo caminando. A veces llevo unos zapatos de recambio en el bolso para aguantar la caminata, pero compensa porque noto que se produce una sensación de bienestar maravillosa y descanso mejor cuando me meto en cama”.

        Se ha visto también que los ejercicios aeróbicos y de fuerza son capaces de reducir el pico de glucosa hasta en un 30 % y no solo eso, de atenuar o incluso disminuir las subidas en las veinticuatro horas siguientes en casi un 35 %. La actividad física acelera el proceso de desintoxicación del cuerpo de la fructosa —presente en muchos alimentos en forma de jarabe—, haciendo que los músculos sean más sensibles a la insulina, disminuyendo los niveles de esta en sangre. Al contraerse los músculos y captar más cantidad de glucosa sin necesidad de insulina, el pico será menor y el páncreas necesitará menos cantidad de esta para combatir la glucosa que queda.

        Cuanto más ejercicio, más se aplanan las curvas de glucosa e insulina”.

        Rojas, M. (2024): “Recupera tu mente, reconquista tu vida”. (pp. 132, 138 y 139). Espasa.


        En el capítulo 20  Flow, el estado de flujo Marian nos relata uno de los casos clínicos que atiende en su consulta de psiquiatría y que aparecen en todos sus libros. Me parece muy importante lo que cuenta sobre los lugares de recuperación que cada uno tenemos para aliviar nuestros malestares psicológicos.

        Caso clínico:

 “Patricia está casada, tiene tres hijos y sufre ansiedad e irritabilidad.

—Soy muy exigente, y me enfado con mi marido y los chicos de forma muy violenta, gritándoles por cualquier cosa. Me estoy convirtiendo en una persona que no me gusta. Soy incapaz de relajarme, siempre vivo en tensión y en alerta. No sé cómo parar el bucle.

Dejó de trabajar tras el parto de su tercer hijo, que nació prematuro, y estuvo meses en terapias y con pruebas.

 —Un día, volviendo de dejar a los niños del colegio, en el coche, en pleno atasco y lloviendo, sufrí un ataque de ansiedad —me cuenta—. Dejé el vehículo en el arcén de la carretera, cogí un taxi y me fui directa a un hospital cercano, donde me recetaron unas pastillas y me derivaron a psiquiatría.

        Patricia es muy perfeccionista y percibe una sensación de insatisfacción constante. Se añade que tiene una relación complicada con su madre, que la visita todos los días, lo que le potencia su hiperexigencia con comentarios negativos como que a pesar de haber dejado de trabajar, su vida sigue siendo un caos. Me reconoce que a veces a solas, esta frase vuelve con fuerza a su mente y le hunde. Le explico lo que está pasando:

PERSONALIDAD: Exigente, muy sensible, voz interior machacante.

FACTORES DE ESTRÉS: Desorden, hijos que no obedecen, sensaciones de caos, las conversaciones con su madre.

 VÍAS DE ESCAPE: No tiene.

        Le prescribo medicación para regular sus niveles de tensión y ansiedad, y comenzamos con un plan de conducta y gestión emocional para poder reconducir su estrés. Al mismo tiempo, nos damos cuenta de que no tiene lugares de recuperación. En estos casos buceo en la vida del paciente intentando hallar aficiones que puedan ayudarle. A Patricia le encantaba pintar platos, lo hizo en la baja maternal de su primer hijo, y lo disfrutó mucho. Dicho y hecho. Al cabo de unos días monta en el sótano de su casa un pequeño taller. Llama a su antigua profesora de pintura y esta le comenta que tienen pedidos de platos antiguos para barnizar, restaurar y colorear, y está buscando exalumnas que la apoyen en el proyecto.

        Cuando vuelvo a ver a Patricia al cabo de unas semanas, me encuentro con una persona distinta. Es feliz, ha puesto en orden su vida, se levanta y, tras llevar los niños al cole y dejar la casa recogida, comienza a pintar y restaurar. Hay días que le dan las cinco de la tarde. Al hacerlo su cerebro entra en estado de flujo. Esa sensación es maravillosa porque le genera mucho bienestar.

 […]

¿Cuáles son tus lugares de recuperación? 

¿Dónde encuentras tu Flow, estado de flujo?

        Mihaly Csikszentmihalyi nació en Fiume, en Italia —actual Riijeka, en Croacia—, un pueblo muy cercano a la frontera de la antigua Yugoeslavia. En su infancia pasó una temporada en un campo de prisioneros italianos, y en sus entrevistas reconocía que aquella experiencia le marcó profundamente. Descubrió en su encierro el ajedrez, y se dio cuenta de que cuando jugaba era capaz de abstraerse de lo que sucedía en el entorno, lo que le ayudó a gestionar mejor su estancia allí”.

[…]

        “En su obra Flow: The psychology of optimal experienceFluir, una psicología de la felicidad— expone cómo la felicidad del ser humano puede mejorar si introduce más flow. En él el individuo se encuentra plenamente inmerso y une sus habilidades en forma de pasión, ilusión máxima, reto y atención plena. Quizá por eso llevo años recomendando a mis pacientes que retornen a sus hobbies y eviten las pantallas”.

        ­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­­Rojas, M. (2024): “Recupera tu mente, reconquista tu vida”. (pp. 359, 360, 356 y 357). Espasa.

          Esperando que te haya gustado el artículo, puedes conocer más sobre la autora en:

 Ins: marianrojasestape/

Y recuerda, “Aprende, comparte y sonríe”.

Ins: iglesias.paulino/

Un saludo muy afectuoso.

Paulino.

 Vídeo de presentación del libro:


                                         Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=wn8LXchyHwo