Dra. Marian García ( @boticariagarcia )
es doctora en Farmacia y graduada en Nutrición Humana y Dietética y en Óptica y
Optometría. La @boticariagarcía, como es conocida en las redes sociales acaba
de estar en Vigo, en concreto en La casa
del Libro y en el Club Faro
presentándonos su libro “Tu cerebro
tiene hambre. 5 grandes cambios que te ayudarán a perder grasa y ganar salud”
de la Editorial Planeta.
La misma doctora nos cuenta cómo comenzó
todo:
“Empezó a ejercer en una farmacia
rural en Cuenca, desde donde, gracias a internet y las redes sociales, dio el
salto a los platós de televisión. Cansada de escuchar entre sus clientes la
cantinela de “He leído en internet que…”, comprendió que la única forma de
luchar contra el doctor Google era unirse a él, así que abrió un blog para
explicar cuestiones relacionadas con nutrición y salud”.
García, M. (2024): “Tu cerebro
tiene hambre. 5 Grandes cambios que te ayudarán a perder grasa y ganar salud”. (Solapa de la portada). Planeta.
¿Conoces el Partenón de la salud de la
@boticariagarcia?
Marián identifica la arquitectura
del Partenón griego con nuestro Partenón
particular que consta de las cinco partes que representan los cinco ámbitos de
nuestra vida y nuestro cuerpo sobre los que podemos actuar para encontrarnos
mejor. No te desvelo el dibujo que aparece
en su libro; pero te cuento la explicación mitológica que nos regala la autora:
“El Partenón de Atenas es un templo
griego dedicado a Atenea, diosa de la sabiduría, de la razón, de la justicia,
de la inteligencia, de la estrategia, de la ciencia… y sí, también de la
guerra. La diferencia es que, mientras el dios masculino de la guerra, Ares,
tenía un temperamento terrible —era explosivo, bruto, violento, agresivo y
amante del conflicto—, Atenea dirigía todas las batallas de manera inteligente
y ordenada.
Y ahí está la clave. Queramos o no,
vivimos bajo una continua amenaza. El
mundo se ha convertido en un lugar hostil para mantener la paz en nuestro
cuerpo. Ni las ciudades, ni los horarios, ni los supermercados, ni la
publicidad… ¡ni siquiera muchas de las dietas que nos recomiendan!, están
diseñados para proteger nuestra salud
metabólica y nuestra salud mental.
Nuestro entorno, gobernado por Ares,
nos reta con batallas diarias contra las que debemos lidiar para mantenernos
sanos. Por eso necesitamos a una patrona como Atenea, diosa de nuestro
Partenón, que sepa luchar contra la adversidad de manera inteligente, ordenada
y con una estrategia basada en la ciencia”.
García, M. (2024): “Tu cerebro
tiene hambre. 5 grandes cambios que te ayudarán a perder grasa y ganar salud”. (p. 21). Planeta.
¿Cuáles son los 5 tipos de hambre con los que
juega la @boticariagarcia?
Uno que ya lleva leído unos cuantos
libros sobre nutrición, lo de los 5 tipos de hambre me parece SUPERINTERESANTE,
como diría Marián:
“En general, hay cinco tipos de hambre
que nuestro cerebro tendrá que gestionar como buenamente pueda. Y, por
supuesto, por si todo esto no nos estuviese complicando la vida lo suficiente,
podemos tener más de un tipo de hambre a la vez.
1. El hambre-hambre. […] Esta es el hambre física o fisiológica que
aparece, por ejemplo, cuando llevamos con un mísero café en el cuerpo desde el
desayuno y al mediodía nos empiezan a rugir las tripas […].
2. El hambre emocional. Lo malo es que el estrés, la ansiedad o el
aburrimiento también pueden provocar sensación de hambre, aunque no tengamos
hambre-hambre de la buena. […] En estos casos, recurrimos a la comida como una
forma de afrontar o satisfacer estas emociones. […]
3. El hambre ambiental. […] Es el hambre “culo veo, culo quiero”, el
que te hace pedir postre aunque estés lleno, porque “la tarta de queso de este
sitio está brutal”. […]
4. El hambre hormonal. […] Un exceso de grasa acumulada en el cuerpo
puede hacer que las hormonas que regulan el hambre y la saciedad dejen de
funcionar correctamente y que no nos sintamos saciados aunque hayamos comido
más que suficiente, como les ocurre a algunas personas con obesidad. […]
5. El hambre Dragon Khan. Y ahí no acaba la cosa, porque, cuando
comemos y se absorbe el azúcar de los alimentos en la sangre, se pueden producir
verdaderas montañas rusas de glucosa, con grandes subidas y caídas. Esas caídas
tan pronunciadas motivan a nuestro cuerpo a ir a la caza y captura de más
alimentos azucarados para elevar los niveles de glucosa y restablecer el
equilibrio. Aparece el clásico “antojo de dulce” o “mono de chocolate”.
Como veis, no todos los tipos de
hambre son iguales ni se pueden controlar de la misma forma, por lo que es
importante entender cómo funciona cada uno para poder gestionarlo mejor. Sobre todo, es importante entender quién
está detrás de esas señales que desencadenan los distintos tipos de hambre”.
¿Cuál es el elixir de la eterna juventud?
Acerca de la restricción calórica
Marian nos cuenta algo tan simple como que:
“El elixir de la eterna juventud en
este caso tiene poco glamur. Ni el santo grial ni la piedra filosofal; el
secreto de la longevidad es algo que suena muy poco exótico: limitar la ingesta
energética. En dos palabras: comer poco.
Un grupo de investigadores tras
hacerles unas cuantas perrerías a un puñado de moscas, monos y ratones,
comprobaron que la restricción calórica era el método más efectivo para
aumentar la esperanza de vida. Dándoles de comer un 20-40 % menos de calorías,
pero cubriendo las necesidades de todos los nutrientes para que no les faltara
de nada, se dieron cuenta de que, al comer menos, aumentaba la esperanza de
vida de estas criaturas del Señor.
Y diréis: “OK, esto pasa en moscas,
ratones y monos, pero… ¿y en seres-humanos-cotidianos?” Pues parece que también.
García, M. (2024): “Tu cerebro
tiene hambre. 5 grandes cambios que te ayudarán a perder grasa y ganar salud”. (pp. 186 y 187). Planeta.
¿Conoces las famosas SUPERQUINAS de las que
habla Marián en sus charlas?
Entre los muñecos que utiliza en sus
charlas, sobre las SUPERQUINAS comenta:
“El
eje intestino-cerebro está demodé. Hoy sabemos que la Santísima Trinidad
de la salud es el eje intestino-cerebro-músculo. Bueno en realidad, saberlo
saberlo solo lo sabemos unos cuantos, pero la buena noticia es que, después de
leer este capítulo, tú también pasarás a formar parte del selecto club.
Gracias al doctor Javier Butragueño
( https://paulino-iglesias.blogspot.com/2024/02/entrena-para-la-vida.html) enlace artículo mi blog), que me ha desentrañado pacientemente estos nuevos
misterios de la fisiología, he tenido la suerte de conocer la vida, obra y
milagros del miocito. Y resulta que la célula cachas del cuerpo humano ha
resultado ser mucho más que el músculo que vemos en el espejo: tiene el poder
de generar superquinas, la mejor medicina.
[…] (Las superquinas) Son las moléculas del movimiento que se liberan
en el músculo al hacer ejercicio físico, pero también en distintos órganos y
tejidos del cuerpo. Se descubrieron hace unos veinte años y, si ya entonces
sabíamos que hacer ejercicio era beneficioso, a medida que avanzamos en el
conocimiento de las superquinas, entendemos mejor su verdadera dimensión. Y es que son la verdadera medicina natural
de nuestro cuerpo. El quinto elemento de nuestra salud. Las superquinas suponen
una auténtica revolución y, si no te mueves, te las pierdes”.
García, M. (2024): “Tu cerebro
tiene hambre. 5 grandes cambios que te ayudarán a perder grasa y ganar salud”. (pp. 207, 214 y 215). Planeta.
¿Qué son los test nutrigenéticos?
A veces nos olvidamos de la
importancia de los genes:
“La nutrigenética es una rama de la
ciencia que estudia cómo nuestros genes influyen en la forma en que nuestro
cuerpo procesa los nutrientes. Por ejemplo, cuando comes unas lentejas, en tus
genes está escrito cómo van a ir digiriéndose y asimilándose sus componentes.
Así que, aunque tu prima y tú os comáis el mismo plato de lentejas, no las vais
a procesar igual.
Recordemos que en esas semillas está
escrito si somos más eficientes para metabolizar los carbohidratos o las
grasas. El objetivo de la nutrigenética es entender de qué pie cojea cada uno
para establecer una estrategia nutricional personalizada.
Los test nutrigenéticos son pruebas
que analizan las variantes genéticas que influyen en cómo se procesan los
nutrientes en el organismo (es decir, en su metabolismo) y en cuál es la
respuesta individual a la dieta. Estos test se realizan con una muestra de ADN
que se obtiene a través de una muestra de saliva o de sangre.
[…]
¿Cuántas
tazas de café puedes tomar al día? La respuesta también está en tus genes. Puede
haber variantes específicas en el gen CYP1A2 que nos conviertan en
metabolizadores rápidos o metabolizadores lentos. Hay gente que puede tomarse
un café antes de irse a la cama y acto seguido troncharse como un lechón, y
otra que, si se toma un café a las cinco de la tarde, ya no pega ojo hasta el
día siguiente. Esto se debe a la presencia de variantes específicas en el gen
CYP1A2”.
García, M. (2024): “Tu cerebro
tiene hambre. 5 grandes cambios que te ayudarán a perder grasa y ganar salud”. (pp. 291 y 296). Planeta.
Y como despedida, coincido con Marián
que la ciencia y el humor casan muy bien:
“La doctora Marián García (Boticaria
García) afronta el gran reto de acabar con los mitos y prejuicios acerca del
sobrepeso y la obesidad. Ha llegado el
momento de dejar de echarle toda la culpa a la falta de voluntad. No eres
tú, los verdaderos responsables de que perder peso a veces parezca misión
imposible son tus adipocitos inflamados, tu microbiota revolucionada, tus
músculos tristes, tu cerebro hambriento, tus genes ahorradores o el dichoso
cortisol. Tu cerebro tiene hambre aborda
la pérdida de peso desde un punto de vista divulgativo y divertido, recurriendo
a los mejores endocrinos del país y a los últimos estudios científicos internacionales.
Y todo con el estilo que la caracteriza,
poniendo el humor al servicio de la evidencia científica más rigurosa”.
García, M. (2024): “Tu cerebro
tiene hambre. 5 grandes cambios que te ayudarán a perder gras y ganar salud”. (Contraportada). Planeta.
“Aprende, comparte y sonríe”. ( @iglesias.paulino )
Un saludo muy afectuoso.
Paulino